viernes, 24 de septiembre de 2010

En estos últimos meses no hemos publicado nuevos artículos ni actividades realizadas por el taller makarenko.
En esta oportunidad queremos incluir un espacio cultural para que nuestros lectores encuentren expresión en el campo de la literatura, y por que no, animarse a publicar en nuestro blog creaciones propias.
Comenzamos hoy con poesía creada desde el seno del pueblo, como un desafío más apostando a la generación de cultura popular.

Al comandante "Che" Guevara

Cuando al son de los imperios
claman todos:
¡derribad los muros!
Te recuerdo luminoso
en el combate,
de la Quebrada del Yuro.
Y te siento un poco Artigas,
un poco Mao...
y Simón Bolívar.
Con tu sangre has teñido
las banderas,
que contigo hoy flamean
en tu América,
en tu Africa,
en tu Asia.
Porque Berlín no fue tu muro,
ni tu cañón pisoteó Checoeslovaquia,
y Afganistán a ti
nada te reclama.


Jorge Pérez.


Cuando esté lejos

Entre las hojas amarillas
de un libro viejo,
te mandaré una canción ,
cuando esté lejos;
para que sepas mi amor
que no te dejo
y que volveré a vos
cuando sea tiempo.

Cuando no tengas de mi,
más que rumores,
y me creas ver venir
entre mil flores,
yo me apareceré
con mis amores,
una bandada alegre
de niños pobres.


Jorge Pérez.


Se me antoja

Se me antoja un charlatán
en un altar encaramado,
guiando viejos tristes
al ocaso.
Se me antoja el charlatán
hablando fuerte en un estrado,
arriando nasas ciegas
al cadalso.

Se me antoja una luz
brillando clara, allá en lo alto
en la mirada de un joven
rebelado.
Se me antojan soles
por toda la patria,
gritando: ¡libertad
al explotado!
Se me antoja un "mandamás"
que pisotea al indefenso,
y lloriquea cuando es hecho
prisionero.

Se me antoja ver sonriente
a una muchacha,
liberada de ser virgen
y sin culpas.
Se me antoja ver jugar
a dos chiquitos,
que se ríen balbuceando
palabrotas.

Creo que la vida es todo eso;
Ir creando y
destruyendo lo ya viejo.


Cuando quieras correr


Cuando quieras librarte
,
de tener que pensar,
que tu quieres ser libre,
pero no hay libertad.

Que la tierra es ajena,
y los castillos también, pero el sol es de todos,
y el derecho a crecer...

Que los tiempos cambiaron,
y tu no sabes por qué,
nuevas mentes sembraron
ideas, ¿de quién?

Horas corren de prisa,
nevando cabezas,
qué helada es la brisa
del tiempo ¡qué pena!

¿Y dónde irás con tu mente blanca,
y mostrarás tu sonrisa vaga.
y tu mirada abstracta,
y tus manos castas?

El sol vuelve a mostrarse
y es tuyo también.
Y las flores se abren,
para tí, lo sé.
Cuando quieras librarte,
no te olvides saber,
que tus horas se escapan,
y tu quieres correr.
¿Y dónde irás con tu mente blanca,
y mostrarás tu sonrisa vaga,
y tu mirada abstracta,
y tus manos castas?