viernes, 3 de enero de 2014

rol del educador popular

Evidentemente, la ideología del educador no se puede desprender del acto educativo en su totalidad. La concepción del mundo que tiene el docente, se manifiesta en los vínculos que va construyendo con los educandos, y de esa forma también queda al descubierto  la lucha que se da en la sociedad dividida en clases. 
Estamos en un mundo dominado por una clase social que ostenta el poder económico y político en lo nacional, y a la vez determinado por el dominio imperialista que asfixia a los países dependientes en lo económico, y cuando éstos se revelan, expresa ese dominio también en el terreno militar, mediante diferentes formas, incluso las organizaciones como la ONU y la OTAN.
Todo eso influye en las subjetividades y en el proceso del conocimiento, y se expresa aunque se quiera evitar, en diferentes intersticios que dejan tanto las instituciones como la relación educativa en sí. Nadie es inmune a la cultura dominante, como tampoco a la cultura de las diferentes clases que están en pugna con ella. Eso es la política, y es una hipocresía o una ingenuidad, pensar en una educación totalmente inmune a una posición política en referencia al arte, a las ciencias, a la filosofía , la psicología y todas las actividades humanas. Cuando se permiten las privatizaciones de las instituciones educativas, se manifiesta una posición política que subyace tras esa decisión; es una posición elitista que pretende una educación sólo para los ricos. Cuando se lucha por la educación pública, se expresa su contrario, porque se está luchando por una educación democrática y popular. Y eso que pretenden ocultar los poderosos, es nada más ni nada menos que la raíz del problema educativo en cualquier país. Una clase lucha por permanecer en el poder, y usa como herramienta su cultura, pretendiendo que sean sus hijos solamente los que dominen la técnica, las ciencias y la cultura en general, para que los hijos de los obreros sigan siendo un instrumento más para que el sistema de injusticia  se reproduzca. 
Los docentes,  los técnicos y científicos, hombres de la cultura y todas las disciplinas universitarias nacidas de la clase trabajadora, evidentemente pueden ser elementos permeables a la ideología del proletariado, y que se dediquen a trabajar para  transformar la sociedad y poner en riesgo el statu quo de los que ostentan el poder.
Esa es la lucha que se debe afrontar a todos los niveles, en el tema educación hoy. Es la tarea histórica de los trabajadores de la educación, democratizar la enseñanza, educar a los desposeídos, para que dominen la técnica, el lenguaje, las ciencias y ponerse como objetivo la transformación del mundo. 
                                                                                                                      Jorge Pérez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario